A través de la pintura represento la emocionalidad detrás de una construcción que al primer impacto y debido a su materialidad, puede parecer fría y dura, pero que, al habitarla el hombre, se transforma en una extensión de nosotros mismos. Con espátulas y acrílicos, usando transparencias de colores, doy una percepción, una idea del paisaje arquitectónico. Lugares del día a día, tangibles, vivibles que representan momentos de la historia y que son tan parte nuestra como nuestros antepasados. En este sentido mis composiciones pictóricas buscan lograr una conexión con la parte humana que hay detrás de una construcción y durante este proceso investigativo nos encontramos con cuestionamientos que mi obra busca responder: ¿Quiénes fueron partícipes de su origen? ¿Quiénes, a través de su imaginario, lograron hacerla realidad? ¿Quiénes con sus manos les dieron forma?